PERSONAJES EN EL AMAZONAS BRASILEIRO

Luis tiene 29 anyos. Es de complexión fuerte, pecho ancho, espaldas grandes, de los de tirando a bajito, con el pelo corto y peinado. Luce una camisa bien planchada. Su habla y sus gestos son suaves, delicados. Es bancario aunque hizo un doctorado en liguistica, en plantas medicinales. Es creyente, católico y cree en las fuerzas paranormales. Ha visto moverse una cuchara sin que nadie la tocara. Le comento que yo he visto a magos hacer cosas más increíbles y que no por eso creo que tenga una explicación paranormal. Es más, le digo que si realmente alguien pudiera mover simplemente un palillo sin ningún truco sería más famoso y ganaría más millones que el bill gates. Pero él se enrroca en su fe, de esa forma tenaz e ingenua que tienen los verdaderos creyentes. Ha participado en grupos de teatro en santarem, traduciendo a victor hugo y a otros autores. Cuenta, con orgullo, las dificultades que tiene la traducción. Pero se disolvió el grupo. También hay un cine pero esta cerrado. La primera vez que marchó a una gran ciudad fue a são paulo. Vio una exposición de dali que le impresionó. Aún guarda como una relíquia una postal que compró en esa ocasión. Le gustaría volver a são paulo, allí esta todo: fellini, visconti... todo el cine, todo el teatro. Es dificil, pero, vivir allí. Aquí tiene un trabajo, y algunos suenyos. Le gustaría tener un hijo y criarlo. Sin la mujer, aclara. Le comento que eso me parece más dificil que mover un palillo sin ayuda. Sonrie, no tiene prisa.

Cristina tiene 26 anyos. Es delgada y de ojos claros lo que le da una falsa primera impresión de debilidad. No lo es. Es fibrosa y resolutiva. Esta madilenya y biologa lleva un anyo y medio viviendo en una comunidad en la selva. Su trabajo consiste, esquemáticamente, en contar unos tipos de árboles en la selva. Los cumarú (Dipteryx odorata) y los copaiba (Copaifera spp). Cuesta imaginarse siquiera un mes de tu vida contando árboles en medio de mosquitos, calor y bichos que te ponen huevos debajo de la piel. Sin embargo está encantada y no se cree que haya gente que no la envidie. La verdad es que me sorprende su franqueza, está en la fase de replantearse todo, de cuestionar las verdades, de poner boca abajo las creencias: las propias y las de los demás. Es inquisitiva y persistente. Es, según ella, un número 4. Según la teoria de los eneagramas es uno de los 9 tipos de personalidad. Hay que joderse, uno estudia 5 anyos psicologia y le hablan de complejos sistemas de personalidad y unos sufis, que no tienen otra cosa que hacer, se inventan una simplería y te dejan sin trabajo. Pero volviendo a ella, vive en una pequenya comunidad, en un pequenyo universo donde todo el mundo se conoce y todo el mundo critica a todo el mundo (la ladrona oficial, la puta...), pero en el que sin embargo todo el mundo es acogido y no se margina a nadie. Ha llegado a la conclusión que la gente es sorprendentemente igual en todas partes, si les quitas el barniz de la cultura sentimos y pensamos casi lo mismo. Y somos los mismos. Está tan naturalizada con el medio que está enganchada a la mandioca. Diosss. Cuando habla de ella misma recuerda a el antropólogo inocente de nigel barley pero cuando comenta las anécdotas de la comunidad recuerda las chroniques de lîle grande de lauzier. Le animo a que las escriba, estoy convencido de que serán magníficas. Cuando la veo tratar al presidente de la comunidad borracho, ayudar a su mujer a cocinar o mandar su cuadrilla de trabajo, gana más puntos. Yo le pasaria del 4 al 8. Como mínimo.

Philip es francés deber rondar la treintena pelada. Es alto, musculado, rubio, bronceado. Tiene cuasi rastas. Es la imagen del hippy saludable. Hasta su sonrisa es la sonrisa abierta franca y sin tapujos de los hippies. Tiene una mirada directa y su cara tiene las arrugas de las experiencias firmadas por otros soles. Habla portunyol, una mezcla de castellano portenyo y brasileiro, su melodia es argentina y también algunas expresiones: no me toques las bolas. Desde que era pequenyo miraba los mapas y aprendía nombres: amazonas, tapajós, orinoco... de ahí le puede venir su aficcion a viajar. Viaja solo, recogiendo semillas que luego, supongo, venderá para que otros puedan hacer artesania. Conoce el nombre de muchas, más que la mayoría de los biólogos que conozco sabrían decir de las de su país. Le admira la cantidad de palmeras que hay en brasil. Recoge las semillas, y las cáscaras de algún fruto, luego los brunye con arena, agua y paciencia, sacándoles una apariencia entre lo orgánico y lo mineral. Luego se los lleva a francia. A veces tiene problemas en la aduana, pero él argumenta que es su trabajo y que es el trabajo de mucho tiempo. No sé cual es el nivel de compresión de un gendarme francés, pero philip no es de los que dan su brazo a torcer. De todas maneras hay que reconocer que se lo curra. Compra 8 kilos de feijo y de arroz y se va a la floresta en busca de semillas, ya son ganas. Como máximo busca alguna casa para que le cocinen la comida. Si es lo que dicen: es que hay gente pa' to.

Rafael es culto, divertido, grande, guapo, inteligente, joven, pudiente, sano y urbano (por orden alfabético que no de importancia); también tiene tendencia al sobrepeso (nadie es perfecto) Qué más se puede pedir? Vive en una casa amplia, fresca y moderna con los elementos tecnológicos más novedosos que pueda tener alguien en una gran ciudad. La única diferencia es que vive en mitad del amazonas. Vive con dos amigos más. Es médico, pediatra, dejó são paolo para trabajar con los indígenas en la selva. Ya lo había hecho cuando hizo el servicio militar, a dos días de vuelo de un lugar civilizado (viene del latín civis, ciudad), descubrió otro mundo. Ahora vuelve a trabajar con otros indígenas, algo más cercano, a unos días en barca. Allí está 15 días, con un traductor/guia/escudo, ya que donde va no hablan portugués. Y otros 15 se los pasa en alter do chao, donde en el patio de su casa amplia, fresca y moderna han aparecido las formigas de fogo, pequenyas pero de las que doy fe que muerden. De momento, en plan bíblico, han utilizado agua, fuego y veneno. De momento no se sabe quien gana.

PD.

Rafael me ha escrito posteriormente y aclara: vencemos a batalha contra as formigas, mas nõa a guerra. Es sabio quien no subestima al enemigo.