martes, octubre 30, 2007

AFOTOS




Para los no catalanes, lleixiu tanto significa lejia como leer.
Colcoqué los mapas de las ciudades en las que había estado por todo el piso.
En busca del loro.
Efecto causal óptico.
Pasión reptiliana.
Contraluz.

sábado, octubre 20, 2007

LAS OBLIGACIONES NO CUMPLIDAS

Que me regañan, y con razón, que no escribo nada.
Y, seamos sinceros, tampoco escribo nada del otro mundo.
Glups,
la realidad me envuelve y las obligaciones también,
el tiempo vuelve a reducirse
glups.

miércoles, octubre 17, 2007

LOS CAMBIOS EN LA CIUDAD

Paseo por la playa y grupos de mujeres orientales se ofrecen a hacer masajes a los devoradores de sol.
En el supermercado venden cuscus con letras árabes y logotipo catalán o mandioca con marca blanca de supermecado de toda la vida.
De gran via para abajo no hay nadie que haya nacido a menos de 500 kilómetros de aquí.
La barcelona que de pequeño siempre recuerdo gris está tomando color.
La única pega son los turistas.
Me gusta que viva en esta ciudad gente con otros acentos, otros idiomas y otras pieles. Pero los turistas...
Uf!
Me sobrán los turistas.

lunes, octubre 15, 2007

REFRANERO POPULAR

Dicen que a quien dios no les da hijos el diablo les da sobrinos.
Bueno, me gustaría actualizar el refranero:
A quien dios no les da padres, el diablo les da tios.
Yo ya me entiendo.

sábado, octubre 13, 2007

LA FRASE

Me vino como un relámpago.
Resumí en una frase algo de lo que me hice consciente en este viaje.
Sé quien soy. Y sé quienes son los que me rodean.
Tal cual puede parecer pretencioso, esotérico, enigmático o insignificante (para ese viaje no hacía falta tantas alforjas).
Es lo que tiene los relámpagos.
Sin embargo, me siento satisfecho del resultado.

miércoles, octubre 10, 2007

EL CAMINO QUE MUCHA GENTE RECORRE

Hay sensaciones que a pesar de que deben ser cuasi universales y a pesar de que hayamos oído o leído sobre ellas debemos conocer por nosotros mismos para poder realmente abarcarlas: el abismo cálido e inquietante del primer beso; el abrumador dolor de la primera separación; la sensación profunda y estable de ser y tener un amigo; la pérdida definitiva, irreparable e injusta de la muerte de alguien querido... Me siento en una nueva para mi: el sentir que está formándose una persona de la que seré, si el destino no se opone, el padre.

lunes, octubre 08, 2007

APENAS UN PEQUEÑO MOVIMIENTO...

Apenas un pequeño movimiento en la barriga y todo tu mundo se balancea dulcemente.

viernes, octubre 05, 2007

¿QUÉ SERÍAN DE LOS SUPER HÉROES SIN LOS SUPER VILLANOS?

Hellfel es una super villana atípica. En primer lugar no abundan las mujeres en el mundo virtualperoreal pero lo que la hace más extraña es que no busca notoriedad con su poder maligno, ni conquistar el mundo, ni siquiera obtener riquezas. Hellfel (el infierno amargo) es una mujer delgada y tirando a bajita. Ello se debe a que lo que le hace fuerte al mismo tiempo la debilita. La amargura. Una amargura que le impide absorber los nutrientes y la energía necesaria para ser feliz. Su poder, como imaginareis, es el transmutar la energía de los demás. La buena onda en amargor del que se impregna en la camisa, y va penetrando hasta llegar al tuetano, y allí, allí si que has pringao y no hay cura posible. Si alguna vez llega a sentirse realizada es cuando contempla como crece su cosecha de amargura que va sembrando en los corazones de los otros. Eso si, intentando que nadie se de cuenta de ello y manipulando las pequeñas frustraciones y dando eco a las inmundicias, desidia y mal rollo que todos tenemos dentro.
Su uniforme son unas mallas ajustadas de color amarillo vómito. Eso sí, de cara al cómic, y por aquello de que tiran más dos tetas que dos carretas, llevará prótesis que realcen sus carentes nalgas y sus menguados senos.

jueves, octubre 04, 2007

MOSCÚ, BEIJING, BUENOS AIRES Y RELLINARS

La abuela de Salomé me invitó a su casa antes de empezar el viaje. Tiene una casita en la montaña, en Rellinars, donde pasa los fines de semana y las vacaciones. ¿Para qué irse por esos mundos de dios si uno puede disfrutar como dios en su acogedora casa (no sé si dios está en todas partes pero si en muchas frases) plantando tomates que luego acabarán en la ensalada, viendo como se convierten las brevas en higos y como desaparecen estos últimos en la boca de los amigos? Yo, todo hay que decirlo, no conocía esa localidad y acepté ir allí cuando acabase de dar la vuelta alrededor de uno mismo (cosa que no consigo acabar de hacer).
Ya he ido, la casa esta construida por ellos mismos y tienen esos detalles, como recubrir farolas con cristales recogidos de la playa, que le dan una apariencia naïf, sugerente, personal que la convierten en una casita encantada.
Pues eso, que cada vez tengo más la sensación de que los círculos se van cerrando.





lunes, octubre 01, 2007

EN UNA PRESENTACION POÉTICA

No llegan a la veintena las personas que están en la sala. Presentan un libro de poesía. O dos. En la mesa hay cuatro personas, dos poetas y dos criticos-ensalzadores de la obra escrita. Hablan y hablan. El monólogo se convierte en un ruido blanco de fondo. Miro las nucas de los escuchadores. Intento centrarme en lo que dicen pero como si fuese un material antiadherente no consigo seguir más de dos o tres frases seguidas. Casi todo lo que se dice es repetitivo y multiuso para casi todos los poetas que deben pasar por aquí. Es una experiencia insólita: no puedes cerrar los ojos ni irte, no puedes ver la televisión, leer un artículo, hablar con alguien... Realmente es estar a solas contigo mismo. Sin nada mejor que hacer miro y remiro los cuadros que hay colgados en las paredes, algunos me gustan otros me parecen obras mediocres. De todas maneras incluso de estos últimos me fijo hasta en sus detalles más nimios. Tanto que cuando los miro globalmente me parecen nuevos. Uno de los poetas recita sus poemas, sigo su cadencia pero no consigo entrar en lo que dice. Lo mismo me pasa con el otro. De repente una frase: los caracoles que no conocen de caricias esconden sus cuernos al ser tocados por una niña maravillada. Después otra vez caigo en el ensimismamiento hasta que los aplausos finales rompen el hechizo y me puedo levantar.