domingo, julio 30, 2006

PÉRDIDAS

He perdido el blog como perdí a mi tatarabuelo.
Todo por tocar una tecla que era muy bonita de color anaranjado.
Solo que en alemán debe decir: se perderá toda la información que se ha guardado y jamás la podrás recuperar.
Y mira que la tecla era bonita.
Bueno, no lloremos por que las lágrimas no nos dejaran ver el teclado.
Espero que los comentarios que me habéis mandado estuvieran bien guardados, las obras maestras que escribí me temo que están vagando por el éter.
¡Ah! Gracias por vuestros pseudónimos, me paso la mitad del día intentando averiguar quienes sois.
Más cosas, aunque no salgan acentos no es por que desconozca su función, es que en Alemania solo deben tener tiempo para buscar palabras que borren cosas pero no para poner tildes.
Un beso

1 comentario:

El último lector dijo...

Señor, le dije que no debía partir solo. Se lo dije: «Adónde va a ir sin su fiel Passepartout.» Sin mis consejos. Sin mis conocimientos en las nuevas tecnologías. Sin mis diecisiete idiomas. Por favor, apréndalo de una vez: en cualquier idioma el botón naranja es para “guardar”, el botón negro de final de página para “suprimir blog”!

Nuestro viejo “amigo” Fix ha llamado esta mañana. Tiene a su gente siguiéndole por el pequeño asunto de las plantas; aunque esto usted ya lo sabe, lo acabo de leer. No entiende que el señor –un “caballero bien portado”, qué graciosos los diarios alemanes–tiene que sobrevivir de algún modo.

Larga carta de Chesterton, que reservo para su regreso. Páginas y más páginas sobre el eterno conflicto entre el viajero y el turista. Le anoto la frase final: “El viajero ve lo que ve. El turista ve lo que ha ido a ver”.

Sólo dígame que vaya, y voy. Un abrazo de su fiel P.