martes, enero 16, 2007

PAISANAJE

Luis es venezolano y cuarentón. Su cara recuerda, principalmente en la sonrisa y en el pelo, al actor Hugh Grant. Es elegante, seguro de si mismo, inteligente, preciso, sutilmente amanerado, con una levísima ironía en su discurso... No, no estoy enamorado de él. A pesar de no tener raíces catalanas está estudiando catalán. Es más, me dice que yo no parezco catalán ya que mi ele no es palatal. ¡Joder con el venezolano! Lo estudia como el plan B, como lo denomina. El entorno es tan crispado en su país que se plantea emigrar a Barcelona si Chávez sigue haciendo de las suyas. La situación es complicada, más de 50 muertes violentas semanales solo en caracas; intento de cambio de la constitución; división de la sociedad; despidos de los que no votan por el partido (hay un intento de conjunción de este con el legislativo, judicial, gobierno y en la cabeza: Chávez). Parece ser más grave que el payaso populista que se aprecia en Europa. Bueno Luis, si vienes a vivir a Barcelona evitaré las eles alveolares.

Oscar nació hace unos veintitantos años en Huelva de padres peruanos. Viaja solo, bueno, solo con una banderola de España y otra del real Madrid. Las pone en las habitaciones donde duerme y también posa con ellas en las fotos. Ha venido por primera vez a Perú para conocer sus raíces. Comparado con los peruanos que nos rodean les saca un par de cabezas y dos cuerpos. O sea que la cuestión genética no debe ser tan importante como una buena alimentación a base de gazpacho y jamón serrano. Me cuenta preocupado que cuando los guías hablan del genocidio español se siente molesto. Se siente español. Hace dos días he hablado sobre el tema de la identidad nacional y yo manifestaba que no la sentía, ni por España ni por Cataluña. Si acaso por Barcelona (*) Mi interlocutor no lo entendía. Y ahora me viene este y me sale con que se siente español. Los antepasados de los españoles cometieron un genocidio con los antepasados de oscar y a este le molesta que los guías lo digan. Si es que somos muy complicados.

Persy, es limeño y se queja que desde hace 40 años ya no hay limeños, y eso que debe tener unos treinta y pico (debe tener memoria histórica). Es más bien bajito con un tono de piel cobrizo pero sus rasgos son europeos. Se queja que han venido a lima serranos, de la selva, del norte, del sur, del este y del oeste. Del oeste, le digo, pocos, ¿no? Contesta sonriendo que incluso desde el oeste. Me habla de los bailes peruanos: salsa, merengue y no sé cuantos nombres más, de bailes de los que desconozco todo, me cuenta que las discotecas y los salsódromos están siempre llenos. Le confío, con humildad, mi falta de habilidades para bailar. No es una sorpresa para él, sabe que los españoles somos rígidos bailando. Pero supongo que le caigo bien, me cuenta un secreto: el truco es mover la cadera, y me anima, incluso hay escuelas en lima donde se puede aprender, que es muy fácil. No quiero desengañarlo con mis aptitudes. Dios o los dioses me han hecho guapo e inteligente, pero a cambio me quitaron la posibilidad de aprender a bailar. Me cuenta que hay un baile, la marinera, que es un baile de seducción, que si el hombre lo baila bien, y muestra un paso de punta, tacón y noséquemas, tienes a las mujeres en el bolsillo. Jo, tendré que seguir explicando el big bang.

(*) y por el gazpacho, el pa amb tomaquet, el jamón de bellota, el queso manchego, el vino tinto de somontano, ribera del duero, algún rioja, el blanco de alella, las croquetas y canalones de mi madre... Me doy cuenta que lo mio es más gastronómico que espiritual.

3 comentarios:

Hilario dijo...

no sé a quien te refieres con la de mas arriba. ¿Alguien que ha borrado despues su comentario?
ya me contarás
besotes

Anónimo dijo...

Yo soy la de + arriba. Recuerdo tus manos. Necesito tus manos. Tus dedos, tus uñas, tu manera de usarla en mí.

Fdo: Juanita la manca

Hilario dijo...

jajajajajaja,
fue un placer utilizar tu silla de ruedas.