El transiberiano rompe cualquier experiencia anterior. Preso en un espacio limitado te hace libre de tener que hacer nada. La monotonía del paisaje te hace recordar otros paisajes, otras situaciones... No es una experiencia exterior como hacer parapente o subirse a una montaña, es una experiencia interior. Por eso puede darse el caso de personas que lo encuentren aburrido y otras apasionante.
lunes, septiembre 11, 2006
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario